Ahora, en plena crisis, parece que hasta la economía está regida por la genética.
Alteraciones en dos genes que regulan la neurotransmisión de dos hormonas pueden resultar claves para que un inversor en bolsa sea audaz y decida arriesgar en sus operaciones.
Científicos de la Universidad Northwestern (Estados Unidos) han vinculado por primera vez los papeles que juegan las variantes específicas del gen del transportador de la serotononina y el gen receptor de la dopamina para predecir si las personas son más o menos propensas a asumir riesgos financieros.
En su estudio, publicado por la revista 'Plos One', los científicos proporcionaron 15 dólares a 65 estudiantes --seleccionados de acuerdo con determinados perfiles genéticos-- que realizaron 96 'operaciones' de mercado' tras decidir entre dos inversiones, una arriesgada y otra sin riesgos. Se les comunicó lo que podrían conseguir con la inversión sin riesgo y las dos posibilidades que se abrían con la inversión arriesgada. En la primera los beneficios podrían rondar el 3 por ciento, y en la segunda se podría alcanzar una ganancia del 20 por ciento o una pérdida del 10 por ciento. Hasta el final de la prueba, que duró hora y media, no se proporcionaba información sobre cómo evolucionaban las inversiones de cada ensayo. La media final para los participantes fue de 25 dólares, es decir una ganancia del 66 por ciento.
Desde el punto de vista genético, los científicos averiguaron que las personas con el gen del transportador de la serotonina en su versión corta, el 5-HTTLPR (dos copias del alelo corto) invertían un 28 por ciento menos en decisiones arriesgadas que aquellas con la versión larga del polimorfismo (con al menos una copia del alelo largo). De forma similar, las personas que portaban el alelo 7 repetido del gen DRD4 de la familia de la dopamina dedicaban un 25 por ciento más en inversiones arriesgadas que las que portaban otras versiones de ese gen.
Según la coautora del estudio, Camelia M.Kuhnen, la investigación apunta "por primera vez, a los papeles que juegan las variantes específicas del gen del transportador de la serotonina y el gen del receptor de la dopamina para predecir si las personas son más o menos propensas a asumir riesgos financieros.
Esto muestra que la variabilidad individual en nuestra constitución genética afecta a la conducta económica".
jueves, 12 de febrero de 2009
La genética y las inversiones
Publicado por Alberto en 5:01 p. m.
Etiquetas: Divulgación científica
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2 comentarios:
Estamos condicionados por nuestros genes, eso está claro. Al margen de la educación, orientación familiar y social y demás influencias, hay ciertos patrones que definen nuestra conducta y que son inalterables. A ver si no cómo se explica que haya un sector de la población dispuesto a correr cualquier tipo de riesgo, sea físico, económico o de cualquier otro tipo, mientras la gran mayoría somos reacios a correr pequeños riesgos...hay algo en nuestra configuración genética que nos empuja a ello, y si no lo tenemos, somos incapaces de hacerlo, aunque nos vaya la vida en ello.
Besos, Alberto.
Me gustaría que me implantaran un gen que me hiciera comprender como lleva la economía nuestro Gobierno...¡me están volviendo loca!
besito.
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