El poeta y filósofo indio, Rabindranat Tagore (1861-1941) acierta al definir de esta forma tan gráfica la amistad.
Coincido con él en que la verdadera amistad se demuestra en los momentos difíciles. Para las alegrías siempre se encuentran personas dispuestas a estar ahí. Pero en las adversidades... ay... la situación se aclara notablemente y es cuando se recurre a los dedos de una mano para hallar quien te apoye.
Que no os falten esos dedos de esa mano amistosa cuando tengáis necesidad de ella.
lunes, 14 de enero de 2008
La verdadera amistad es como la fosforescencia, resplandece mejor cuando todo se ha oscurecido.
Publicado por Alberto en 9:37 p. m.
Etiquetas: Reflexiones, Una frase: un pensamiento
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