jueves, 23 de abril de 2009

Habrá un día un libro

Sí, habrá un día un libro que...


No tenga hojas ni letras. Su contenido estará hecho de vida. Una vida que podrá ser comprendida por todos quienes lo lean, que podrá ser hogar de quienes deseen formar parte de su historia.Que para ser parte de él sólo habrá que querer sentir, ser capaz de entregar y entregarse.Un libro en el que las manos, los sonidos y el perfume llenarán su cuerpo de un mundo de sensaciones que llevarán lejos.En él podremos subirnos a ese barquito de papel que de niños construimos. Ser el palito de las piruletas. El flautista del bazar que, con su música atrae. La gabardina de ese detective que busca y encuentra. El patito feo que simplemente... es diferente...Habrá un día en que ese libro podrá ser leído por todos y a la vez formará parte de la mejor y más grande biblioteca, la de quienes soñaron con que los libros eran tesoros.¿Habrá alguien que quiera destruir ese libro, quemarlo? No, porque estará hecho de la mayor de las fuerzas: la energía de la amistad y la comprensión.

15 comentarios:

Mercedes Pajarón dijo...

Ojalá haya gente que sepa leerlo y pueda comprenderlo!!! Que ando yo últimamente muy pesimista con lo tonto que se está volviendo el ser humano...

Muy bonito tu escrito, es de esos que "llegan" adonde tienen que llegar...

Pues hala, nada más que por eso, te mando otro beso! (ja, ja, ja, me ha salido un pareado, ja, ja)

Viperina dijo...

El día que exista ese libro, estaré la primera haciendo cola para tenerlo, pues será el más maravilloso de todos cuantos se hayan escrito.
Besos, Alberto.

Alberto dijo...

Merceditas, ale, vamos, con la gente buena que estamos por aquí. Anímate que sí hay personas que merecen la pena (espero que me encuentres entre ellas).
Abre los ojos para ver la realidad de color de esa rosa tan bonita que me has regalado antes.
Merece la pena.
Adelante con una sonrisa.
muamuamua.

Alberto dijo...

Viperina, ojalá que cuando escriban ese libro podamos seguir viéndonos.
Como digo en la cabecera o frontispicio de este mi tiflohomero: "uno sólo está realmente vivo cuando cree en la realidad de los sueños".
Yo qué sé, debe ser que pienso esto porque cuando sueño veo, veo de verdad con colores y todos. Reminiscencias de aquella otra vida en la que veía.
Que estés mejorcita.
Besos.

Liliana dijo...

Merce quitate el pan ese que te tapa los ojos, por eso no nos ves! jajaja
Y pues a donde vea yo a Viperiana haciendo fila ahí me pongo también yo!

b_s_s!!! ;)

HISTORIAS DE ESTA VIDA X JMEC............... dijo...

HOLA,NO ENTIENDO MUCHO TU BLOG,AUNQUE ESTA MUY BIEN,LA PRIMERA VEZ QUE LO ESCUCHO,PERO QUIEN PONE LA VOZ,TELECOM,O TU,LOS LIBROS AUNQUE SE QUEMEN QUEDARAN PARA SIEM`PRE,PERO LOS LIBROS DEL PASADO YA NO VOLVERAN......ABRAZOS......

Claudia dijo...

Ese libro existe Alberto, y se escribe y se abre cada vez que uno se encuentra por la vida con seres que, como bien dices,se ven con el alma. Y sé que sabes que aquello que se mira con el corazón, no está distorsionado, porque el corazón SABE. Preciosa tu reflexión que desde Argentina celebramos, como este cruce por la vida a pura oreja verde, garantía de corazón rojo. Cariños.

Mercedes Pajarón dijo...

Hoy soy yo quien se adelanta y te desea un feliz viernes, Albertito!

Quería aclararte que para mí el ser humano es una masa desconocida y embrutecida, y que ahí no incluyo a honrosísimas excepciones, entre las que estás tú, por supuestísimo! Es que si a lo largo de una vida no aparecieran Albertitos de vez en cuando, hace mucho tiempo que habría emigrado a Marte, ja ,ja,ja!!

No me hagas mucho caso; ayer tuve un mal día...¡Hoy ya luce el sol! Y estoy notando la calidez de un rayo cuyo nombre empieza por A!

Gracias por tus palabras! Un beso muy fuerte!

Alberto dijo...

Merceditas, no sé por qué intuí que ayer estabas algo... ummm... ¿mustia? Se ve que la lozanía de las rosas que nos regalabas era a costa de tu energía ey eso hizo algo.
Como siempre te digo: es un honor escuchar que de algo sirve mi humilde personita.
Ya sabes que aquí siempre tienes guardada una buena cesta de dulces para ti, así que...
Gracias de nuevo, Merceditas por tu afecto.
Muuuaaacccsss (bien sonoro)
Que tengas un bonito día y que ese rayito del que hablas no te deje quemaduras en ciertas partes.
Cuídate.

Alberto dijo...

Ummm... JMC no sé si te refieres a esa voz marciana que puse para que Tiflohomero se escuche, si es así la verdad es que es algo macarrónica, pero como alguien dicen lo bueno es enemigo de lo mejor y más vale algo que nada. Sigo trabajando para que algún día pueda dejar aquí mi voz.
Si es por otra cosa, Tiflohomero simplemente quiere ser un ámbito de cultura general en el que puedan tener cabida gentes buenas y que sea un escapartae de lo que una persona discapacitada puede lograr con ayuda y cariño, además de un poquito de emepeño.
Bueno, ojalá que puedas entenderme.
Un abrazo también para ti y feliz día.

Alberto dijo...

A las narradoras de la oreja verde les digo que son muy halagadoras sus palabras y que me siento honrado por ellas.
Tenéis razón en que ese libro del que hablaba está, al menos, ya iniciado, poprque estamos gente que creemos en él.
Un abrazo y feliz día.

Alberto dijo...

Por cierto, Merceditas ¿dónde dices que llega mi reflexión?

Alberto dijo...

Tienes razón, Liliana. Tenemos que quitarle a Merceditas la venda de los ojos. Luego esa misma venda, a lo mejor me la pongo yo y... ¿se hace el milagro?
muuaaccss

Mercedes Pajarón dijo...

Sí, Albertito, mustia, mustia era la palabra! Como siempre, has dado en el clavo con tu radar! pero ya estoy dando guerra. Ya sabes, mala hierba... (juajuajua)

¿Y no sabes dónde llega tu escrito? ¿Te lo tengo que decir, Albertito? je, je,je...

Un beso de viernes noche!

Alberto dijo...

Merceditas, pues habrá sido de pura casualidad que yo haya dado en el clavo, porque mira que atinar justo en el clavo con lo cegato que soy...
Sí, sí dime donde llega que a uno le gusta que le regalen la oreja.
Pa lante.
Bsssssss. Muac

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