A lo largo de la historia, el Pato Donald ha trabajado, entre otras cosas, como bombero, cuidador de animales, empleado de museo, jardinero, cartero,

Aunque yo recuerdo más al tío Gilito con los signos de dólar en sus ojos y los sacos de billetes verdes, no quiero resistirme a felicitar al Pato Donald, de quien hoy se cumplen 76 añazos.
Seguro que os hará evocar tiempos de la infancia con su inconfundible voz (pinchad en el título y le escucharéis) y sus andares.
Aquí va un poco de su historia.

Pato Donald llegó al mundo el 9 de junio de 1934, de la mano del dibujante Al Taliaferro, sin nombre y con una fisonomía totalmente diferente a la actual. Fue en una de las "Sinfonías tontas" de Walt Disney, de sólo ocho minutos, titulado "The Wise Little Hen" ("La gallinita astuta"). En esta serie habían debutado antes el Ratón Mickey y Goofy (o Tribilín), que a esas alturas ya se habían hecho un nombre.
Pero lo que más identificó al pato en un principio no fue tanto su aspecto, sino su particular voz. Resulta que Walt Disney descubrió en la radio al imitador Clarence Nash, quien había recitado la tradicional poesía infantil "Mary Had a Little Lamb" con la supuesta voz de un pato.
Así las cosas, Disney lo contrató para ponerle voz a un pato - que no era Donald - al cual Mickey perseguía y trataba de cazar en el corto "The Orphan's Benefit".
Disney dio la orden a su equipo de que se inventara un personaje adecuado a esa voz, la cual era especialmente divertida cuando se hacía el enojado. Fue obligatorio crear una caricatura con mal carácter... Primero surgió la voz...y luego la caricatura definitiva...Y Nash fue su único intérprete en inglés.
Extremadamente malhumorado, algo egoísta, romántico, celoso, eterno soltero, perezoso y con muy mala suerte. Su lenguaje es incomprensible y usa un traje de marinero... sin pantalones. Su novia Daisy no se cansa de esperarlo.
Siempre será capaz de transportarnos hacia nuestros recuerdos infantiles. Y es que no existe nadie - por lo menos en Estados Unidos - que no pueda identificarse con él... y con sus incontados errores.
Para muchos fue símbolo de la mentalidad imperialista estadounidense, tanto, que fue protagonista de un famoso libro de los setenta titulado "Cómo leer el Pato Donald", en el cual Ariel Dorfman y Armand Mattelart analizaban las historietas producidas por Disney.
Donald fue toda una innovación, sobre todo si se le comparaba con el dulce Mickey Mouse. Y es que el Pato era capaz de perder la paciencia... y esa era su forma de ser.
A lo largo de la historia, ha trabajado, entre otras cosas, como bombero, cuidador de animales, empleado de museo, jardinero, cartero, encantador de serpientes y vendedor de zapatos. Entre sus enemigos más conocidos están las ardillas Chip y Dale y un oso dormilón, mientras que sus "camaradas" son Panchito, un gallito mexicano, y un loro brasileño.

Pato Donald cumple