jueves, 17 de junio de 2010

El Marriot de El Cairo


Os presento, una vez más, otro hotelito humilde por si no sabéis dónde pasar un fin de semana cualquiera.

Este hotel además de ser uno de los mas lujosos que hay en el Cairo envuelve una historia sorprendente. Su edificio principal se construyó en 1869 para los monarcas europeos que querían estar presentes en la inauguración del Canal de Suez. Antiguamente era un palacio real pero en 2006 fue completamente transformado en el Casino-Resort que podemos visitar.
Las lujosas habitaciones están equipadas con el máximo confort y cumplen todos los estándares internacionales. Cuentan con cuarto de baño con secador de pelo, teléfono de línea directa, TV vía satélite y por cable, minibar, kit de plancha, caja fuerte y conexión a Internet inalámbrica. Todas las habitaciones tienen cama doble o extra grande, moqueta, balcón o terraza y ai
e acondicionado regulable.
El complejo ofrece entre sus servicios e instalaciones caja fuerte, 2 puntos de cambio de divisa, guardarropa, un quiosco, 20 tiendas, peluquería, un comedor y 14 salas de conferencias, 14 restaurantes y bares (algunos están abiertos las 24 horas) y también un pub Irlandés que es el más conocido de la capital egipcia.
Con motivo de la inauguración del Canal de Suez, Khedive Ismail, en ese entonces gobernante de Egipto, decidió construir un palacio para la emperatriz Eugenia, consorte de Napoleón III y prima de Fernando de Lesseps. La influencia del estilo islámico, combinado con las duplicaciones de algunos detalles presentes en el Palacio de las Tullerías consiguieron un efecto único en el edificio que se construyó en su honor.
En 1863, el arquitecto alemán Julius Franz fue quien estuvo a cargo del diseño de esta magnífica obra, que finalmente estuvo completa cinco años más tarde, con la ayuda de De Curel Del Rosso, quien se hizo famoso por proyectar el Palacio Abdin.
Los ornamentos más lujosos que pudieron importarse desde París fueron destinados a decorar los interiores del Palacio. En cuanto al exterior, el arquitecto Barrillet Deschamps tomó en sus manos el diseño de los parques, de los que se pretendía que transformaran las vistas de toda la isla en un inmenso jardín.
Además, se incorporaron a su territorio los ya existentes palacio y kiosco de Mohamed Aly. Estilo europeo y formas islámicas tradicionales se encontraron una vez más para dar lugar a una obra de belleza poco común.
Hoy, Marriott es uno de los hoteles más apreciados por considerarse un ejemplo insuperable de los edificios de líneas occidentales en todo Egipto. Su ubicación, en el mismo centro del distrito más lujoso de El Cairo, lo transforma en una opción perfecta para disfrutar de viajes mágicos a la capital egipcia.


Segunda parte del texto

1 comentario:

Mercedes Pajarón dijo...

El edificio es chulísimo, pero lo que de verdad me atrae es la humildad del conjunto. Por fin sé adónde ir este verano con el dinero sobrante de las reformas hogareñas.

Mucho me temo que ciertos hospedajes pirenaicos no están a la altura del Marriot. Bueno, están a mil metros de altura, pero no me refiero a eso, jajajaja.

Feliz domingósculo! Mua!

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