Que el pasado día 4 no aludiese a la efeméride del nacimiento de mi admirado Louis braille, no significa que lo olvidase, ni mucho menos. Sin embargo, es hoy cuando he recibido este pequeño artículo muy ilustrativo sobre esos punttitos mágicos que, a, quienes como yo, andamos ayunos de vista, nos resultan esenciales para acceder al mundo de la información y la inclusión.
Espero os resulte de interés.
Coincidiendo con la celebración del Día Mundial del Braille, que conmemora el nacimiento del inventor de este sistema de lectoescritura, Louis Braille, hace 202 años, queremos detenernos siquiera fugazmente en un sistema que ha permitido a muchas personas acceder a la cultura.
Según informó la ONCE, el sistema braille juega actualmente un papel esencial en las vidas de millones de personas ciegas y deficientes visuales, al ser la herramienta por excelencia para acceder a la alfabetización, la comunicación y otros materiales escritos.
Además, los libros táctiles permiten a los niños ciegos acceder a la literatura y los estudiantes de Educación Secundaria y los universitarios trabajan con documentos técnicos en braille para tener éxito en sus programas de formación y en sus futuras carreras.
Según informó la ONCE, esta organización impulsa el uso del braille en todos los ámbitos, para que las personas ciegas logren mayores cotas de autonomía personal.
El etiquetado de productos farmacéuticos, de alimentación o de limpieza, la señalización de ascensores, la publicación de folletos de información y de catálogos de museos o la transcripción al braille de cartas de restaurantes y otros servicios que, aunque parecen pequeños, facilitan enormemente la vida de las personas ciegas.
El braille, además de ser un sistema de lectoescritura imprescindible en la educación de los 7.500 niños y jóvenes españoles ciegos y deficientes visuales, es una de las puertas que les introduce en las nuevas tecnologías y la sociedad de la información.
Por ello, a través de la Comisión Braille Española, la ONCE trabaja para adaptar este sistema de lectoescritura a las nuevas necesidades que se les plantean a las personas ciegas, así como a la edición de materiales en braille y relieve.
Además, el braille ayuda a las personas ciegas a utilizar medios informáticos, lo que les ha abierto múltiples posibilidades laborales, de educación o de ocio, entre las que destacan las "líneas braille", periféricos que transforman en caracteres braille la información contenida en las pantallas de los ordenadores y las impresoras personales, o los anotadores digitales, que utilizan un teclado de este sistema para la introducción de los datos.
El sistema braille está basado en la combinación de seis puntos, ordenados en dos columnas de tres cada una (similar a la representación del seis en el dominó), que pueden ser percibidos fácilmente con la yema del dedo. A él se han adaptado alfabetos de todo el mundo, desde el griego clásico al japonés, del árabe al ruso, o del español al coreano.
El relieve se consigue perforando manualmente con un punzón un papel grueso o cartón ligero, aunque también se puede conseguir a través de máquinas de escribir o de impresoras.
Fuente: Servimedia
jueves, 20 de enero de 2011
El braille, herramienta esencial para que millones de ciegos accedan a la cultura
Publicado por Alberto en 9:16 p. m.
Etiquetas: La noticia
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1 comentario:
Ahora sólo falta que se dejen de tonterías como poner en braille que una papelera es una papelera, que la señalización en ciertos ascensores, como el mío, sea incorrecta, y darle más utilidad de la manera más lógica y necesaria en la vida cotidiana...¿Es pedir demasiado?
Un besósculo con puntitos mágicos. Mua.
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