Buena
tarde de jueves.
Como
corresponde, aquí mi nuevo esbozo poético.
Que te haga soñar.
Que te haga soñar.
Un
abrazo.
Huellas
Mi alma
es un campo nevado.
Nieve
blanca
De
blanca calma.
Campo
nevado, nunca hollado.
Mi alma
es una playa desierta.
Arena
fina
De fina
ruina.
Playa
desierta que nunca, al mar, despierta.
¿Podrá
alguien dejar huella
En mi
campo nevado?
¿Querrá
alguien ser huella
En mi
playa desierta?
Una
huella.
Un profundo
beso de labios de mujer apasionada,
Una burbujeante
sonrisa de pícara mirada,
Un
dulce perfume de flor soñada,
Una
tenue caricia de brisa sosegada.
Tu
huella.
¿Querrás
ser para mí
Beso y
sonrisa?
¿Podrá
ser que seas para mí
Perfume
y caricia?
La
noche deja de ser negra
Porque
las estrellas dejan su huella.
La nada
deja de ser nada
Porque
todo es tu mirada.
Las
yemas de tus dedos,
Posadas
en mis resecos labios.
Las
palmas de tus manos,
Abriendo
mis ciegos ojos.
Yemas
de tus manos,
En mis
ciegos ojos.
Dedos
de tus manos,
En mis
resecos labios.
Huellas.
2 comentarios:
Precioso Alberto...No creo que ella te pueda negar nada pidiéndoselo como lo haces...ella dejará sus huellas en esa nieve y esa playa nunca holladas.
Besito volado
Brujita, jajajajajja. La cuestión es que no hay "ella", jajajaj. Y no la habrá. Besito volado de poeta. Ella es la poesía y la sensibilidad.
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