Mientras que hoy se celebra el Jueves Lardero, tradicional
fiesta de mi niñez y juventud, tanto en mi pueblo soriano como en Aragón, en la
que la longaniza o el chorizo eran los protagonistas de meriendas y encuentros,
mientras aguardo a disfrutar esta noche del musical "Sonrisas y
lágrimas", os cuento que me hallo atónito, perplejo, triste en buena
medida.
¿Cómo puede ser que alguien sencillo y humilde como yo, que
tan solo aspira a hacer de este mundo un hogar más cálido, que trata de ser luz
para los demás, tenga que encontrarme con la triste sorpresa que voy a contar.
Ayer, hablando con mi amiga Mercedes, nos dio por bucear en
Facebook por si había alguna referencia a mi persona. Ya sabéis de lo que a mí
me gusta curiosear y estar al día de todo lo que puedo y,por eso, días atrás,
había tenido la intención de registrarme en la citada red social.
Pues bien, cuál no sería nuestra triste sorpresa que nos
encontramos que alguien ha creado el pasado agosto una página cuyo título no es
otro que "No soporto a Alberto Gil" y en la que además de decir que a
la persona creadora le resulto cargante y que "Huellas de luz" es
malísimo, incluye imágenes robadas de mi blog.
Mercedes se indignó, yo aluciné. Más aún al averiguar la
identidad de la persona en cuestión. Alguien con el que tuve una estrecha
amistad y que el tiempo nos distanció, con la que he coincidido con
posterioridad a la creación de la página y me ha tratado como si nada, que
incluso estuvo en la presentación del libro en la ONCE y no dijo nada, que sabe
perfectamente cómo localizarme para haberme dicho a la cara su opinión.
¿Qué queréis? Me duele que una persona con discapacidad
visual severa en vez de alegrarse por los logros que otro ciego consigue se
alegre, me torpedea. Una persona a la que yo jamás he hecho nada malo se
muestre en Facebook en esos términos, persona a la que yo siempre reconoceré
que hubo tiempo en que me enseñó a escribir no sea capaz de llamarme y decirme
que el libro no le gusta, o que es muy malo o que estoy siendo muy pesado con él.
Yo qué sé.
Es verdad, la página de marras no ha tenido ninguna
repercusión, sólo a una persona dice que le gusta desde que fue creada y no ha
tenido ningún comentario hasta que ayer alguno de vosotros, siempre tan
generosos conmigo, dejó su opinión clara y disconforme.
Yo no es que quiera más líos ni problemas con él, trataré de
manifestarle que soy conocedor del tema pero sin ir más allá pero también es
cierto que tanto el título de la página como el que haya imágenes mías sin mi
permiso, seguramente merece que facebook tome cartas en el asunto y la bloquee,
aunque yo no tengo ni idea de cómo son estas cosas.
Jamás creí que sería protagonista de algo así. ¿Es que será
que me estoy haciendo famoso? ¿Cómo puede ser que yo sea objeto de envidia por
parte de alguien?
Naturalmente que admito y acepto que haya a quien no le
guste lo que escribo o que lo juzgue como de mala calidad, pero de ahí a decir
que no se me sop'orta... No sé.
Bueno, gracias por permitir que me desahogue.
Gracias de corazón, porque esto muestra los peligros de la
red y la mala utilización de ella y a mí me duele. Yo qué sé.
Gracias por vuestro afecto y apoyo.
6 comentarios:
Alberto, dijo Heinrich Heine: "todo se te perdonará menos que seas genio". Y ahí lo tienes.
Lo bueno de todo esto es que la verdad siempre acaba saliendo a la luz, ésa es la mayor justicia, que todo se acaba sabiendo. Y allá cada uno con su conciencia. Tú sigue haciendo lo que te gusta, lo que sabes hacer tan bien, y que canten los pajaritos...
Un abrazo sincero.
Esto ya ni se comenta, que ya está pasado. Nos vamos al siguiente post.
Otro abrazo
Bueno, la frase es: "todo se te perdonará menos que seas un genio", je, je, me había comido una palabra.
Ana, es cierto. La cuestión es que no tenía intención de haberlo publicado, pero luego alguien me convenció de que debía hacerlo también. Así que por eso estaba ya todo dicho antes.
Besitos.
Rosa, se ve que tenías hambre y te comiste una palabra. Yo me habría comido mejor un buen trozo de turrón.
Ah, el perdón... qué difícil es aplicarlo de verdad, pero qué necesario resulta. Perdonar es mirar hacia adelante, es construir.
Besos de luz agradecida.
Alberto, ya lo dije dicho en la página de marras apócrifa. Creo que es un excelente libro y semejantes críticas apócrifas no merecen ni siquiera un alto en el camino. Un abrazo.
Paco,m uchas gracias por dejar tu testimonio en la maladada página de marras que tantos quebraderos de cabeza me ha traído. Me gustó especialmente que pusieras de manijiesto el destino de los derechos del libro, algo que parece no haber tenido en cuenta el creador de dicho engendro. En fin.
Una vez más muchas gracias.
Feliz semana de luz.
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